viernes, 1 de octubre de 2010

Estatuas humanas

Esas anónimas personas que vemos en mitad de la calle, con la cara pintada a modo de estatua, disfrazadas de algún personaje que llame la atención. Hay quien dice que lo hacen por necesidad, pero yo no pienso así, yo pienso que lo hace por el puro placer de ver como los niños los miran fijamente, con ese adorable descaro infantil que todos tuvimos de pequeños, y ver como piden a sus padres que se acerquen para ver que es lo que hace ese señor (O señora) cuando echas una moneda en el recipiente que suele haber a sus pies, la mayoría de los padres no pueden resistirse a esto y a menudo se acercan y echan una moneda a los pies de la estatua humana, que acto seguido empieza  a moverse, hace unos cuantos movimientos graciosos, y a veces incluso habla o hace ruidos extraños, siempre dentro de su personaje.

 Algunos sienten lástima por ellos, yo misma la sentía hasta hace bien poco, hasta que pensé para mi misma que una persona que es capaz de plantarse en mitad de la calle pintada entera del mismo color que sus vestimentas, buscarse un traje que encaje perfectamente con lo que ellos buscan conseguir, poder aguantar la postura sin moverse lo más mínimo, y soportar que la gente los mire y aún así seguir sin moverse, no, no merecen que sintamos pena de ellos. Merecen que sintamos verdadera admiración.

3 comentarios:

  1. nunca llegué a sentir pena siempre admiración por hacer esas cosas que nadie más podría hacer.
    :)

    ResponderEliminar
  2. ^^ Es que son... un ejemplo perfecto de dedicación. Se lo curran =)

    ResponderEliminar
  3. demasiado:D
    de dedicación y admiración^^

    ResponderEliminar